Apenas falta una semana para que podamos ver ‘X-Men Apocalipsis’, la última entrega del universo mutante que nos trae Fox. Como su propio nombre indica, esta vez el villano de la historia será Apocalipsis.
Desde los orígenes de la civilización, él fue venerado como un dios. Apocalipsis, el primero y más poderoso de los mutantes del Universo X-Men de Marvel, se hizo con los poderes de otros muchos mutantes, convirtiéndose en inmortal e invencible. Tras su debilitamiento después de miles de años, su desilusión hacia el mundo le obliga a reclutar a un grupo de poderosos mutantes, incluyendo al descorazonado Magneto (Michael Fassbender), para purificar la humanidad y crear un nuevo orden mundial, del cual estará al frente. Mientras el destino de la Tierra pende de un hilo, Raven (Jennifer Lawrence) con la ayuda del Profesor X (James McAvoy) tendrá que liderar un equipo de jóvenes X-Men para detener a su mayor enemigo y salvar a la humanidad de la destrucción total.
Si ‘X-Men: Primera Generación‘ se situaba cronológicamente en los años 60 y ‘X-Men: Días del Futuro Pasado‘ en los años 70, esta vez nos encontramos en 1983, diez años desde que el público en general conoció a los mutantes. Aunque el guión no ha aprovechado esto como las anteriores, que jugaban con ciertos hechos históricos, cosa que les resultaría muy sencilla sobre todo cuando En Sabah Nur “aprende” de la era contemporánea a través de la televisión (Reagan y su “Guerra de las Galaxias” o la invasión de Afganistán por el ejército ruso).
Esta nueva entrega llega a los fans con sentimientos encontrados. Por un lado, y dada la gran aceptación de las anteriores, muchos esperamos una buena película de superhéroes; por otro lado, las primera fotografías de Apocalipsis y las primeras críticas norteamericanas parecen contrarrestar esa esperanza.
Esta vez, Bryan Singer nos trae una dramática historia (no en balde es el fin del mundo, el apocalipsis), muy en el estilo de las últimas que hemos visto como ‘Capitán América: Civil War‘ o ‘Batman v Superman: el Amanecer de la Justicia‘, con una gran carga emocional y un pequeño espacio para el humor. Es una historia en la que los principales protagonistas deberán decidir a qué bando unirse y vencer sus miedos.
La historia está bien contada, con buenas interpretaciones (aunque algunos actores parece que a veces han puesto el automático al actuar) y sus dos horas y media no resultan pesadas en absoluto. Sin embargo la primera parte se me antoja demasiado larga (que no lenta). Tras una secuencia en Egipto donde se nos explica de forma ágil y rápida quién es En Sabah Nur y qué hace, el “segundo acto” nos lleva por varias partes del mundo para mostrarnos cómo han continuado sus vidas Magneto, Mística o el Profesor X.
Mientras, el villano de la historia está reclutando a sus “jinetes” en lo que, como digo, resulta una larga parte de la película. Repito, no se nos hará aburrida esta búsqueda de los cuatro “hijos” (como él los llama), pero deberemos esperar más de la mitad del metraje para asistir al enfrentamiento esperado (y no me refiero solo al enfrentamiento físico).
Y este es otro pequeño lastre en la grandiosidad que esperamos de esta historia. El villano no termina de resultar lo temible y poderoso que debía. Es cierto que demuestra grandes poderes en la cercanía, pero no impone su presencia ni su forma de actuar, ni siquiera cuando se “convierte” en gigante. No es patético, pero es un villano a la altura de los anteriores y no la amenaza definitiva que debería. Tal vez esto sea porque en vez de presentárnoslo como el principal antagonista, capaz de destruir el mundo él solo, el guión lo utiliza como mero catalizador para reunir a los X-Men.
Por supuesto, Apocalipsis no es un personaje que evolucione en absoluto, pero es lógico en este caso. Del resto sí vemos destellos de buenas tramas, sobre todo en Jean Grey, aunque nos la presentan demasiado poderosa desde el principio. Scott, en cambio, queda en un segundo lugar, con un tratamiento pobre a pesar del problema con su poder y su tragedia.
Además de éstos veremos a varios mutantes, muchos nuevos y algunos conocidos (incluido cierto viejo amigo), pero han enfatizado demasiado en algunos de los protagonistas (por el caché y la popularidad de los actores que los interpretan). Eso sí, sin llegar como digo a que sea una mal película. Es una película correcta, bien hecha, bien trazada pero sin alma. Correcta pero que no nos aporta nada nuevo (a no ser que sean unos cuantos nuevos personajes con los que reiniciar la saga).
En resumen, no está mal pero no ha resultado ser la conclusión de la trilogía que esperábamos y que se merecía viendo los buenos trabajos anteriores. Apocalipsis tal vez no haya logrado el fin de mundo, pero desde luego parece que ha acabado con estos X-Men para dar lugar a una Nueva Generación.
La secuela de ‘X-Men: Días del futuro pasado’, Apocalipsis, nos acercará a la historia del origen de los mutantes pero ambientada en los años 80, siguiendo así la línea temporal de ‘X-Men: Primera generación’.
En el reparto tendremos nuevos actores encarnando a versiones jóvenes de personajes conocidos ya que Tye Sheridan será Scott Summers/Cíclope, Sophie Turner será Jean Grey/Fénix, Alexandra Shipp Será Ororo Munroe/Tormenta, Kod Smit-McPhee será Kurt Wagner/Rondador Nocturno, Lana Condor será Jubilation Lee/Júbilo y Ben Hardy será Warren Worthington III/Ángel/Arcángel, y también contaremos con la vuelta de algunos miembros del casting original de X-Men, como Nicholas Hoult como Hank McCoy/Bestia, Jennifer Lawrence como Raven Darkholme/Mística, Michael Fassbender como Erik Lensherr/Magneto, Evan Peterscomo Peter/Quicksilver, James McAvoy como Charles Xavier. Además Oscar Isaac encarnará al villano En Sabah Nur/Apocalipsis.
‘X-Men: Apocalipsis’ dirigida por Bryan Singer, se estrenará en EEUU el 20 de mayo de 2016.
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